Empecé «crónica de un reencuentro» por dos motivos: el primero es que siempre que me reúno con alguien especial a quién hace mucho que no veo, siento que es una ocasión digna de ser escrita y recordada. Y el segundo, porque así sois vosotros quiénes me dais vuestra versión de ese reencuentro y no soy yo la protagonista de este blog, sino que lo compartimos.
Pero cada vez son más las crónicas que se me acumulan, ya que últimamente he tenido más tiempo (es lo que tienen las vacaciones y fines de semana libres) y me he propuesto cuidar lo que considero una de las cosas más valiosas de mi vida: LOS AMIGOS. =)
Tenía pendiente contar cierta visita a Palma (pero una de las dos escritoras se está haciendo de rogar, ejemmmm) y otra entrada super chula que se me acaba de ocurrir y que llegará también en unos días =) Pero llevo dándole vueltas a este tema desde que volví de Sevilla hace una semanita más o menos, y ayer me fui a la cama con una sonrisa TAN GRANDE que no puedo dejarlo pasar más. Así que se va a colar aunque el reencuentro fue posterior.
La culpa la tiene María García Lázaro. Sí sí, así, con apellidos y todo para que se sepa bien clarito de quién hablo. Le propuse escribir esta crónica de un reencuentro, como corresponde según las normas de mi blog, y me dijo que NO. Con todo su descaro sevillano. (guiño guiño) Y me encanta, porque gracias a eso voy a ser yo la que cuente lo que supone ella para mí y por supuesto, VOLVERNOS A ENCONTRAR, no sólo físicamente =)
Desde Junio aproximadamente (mi cena en ‘la cocina del desierto’ con Nereida) las 4 locas guineanas del año pasado teníamos reservado el primer fin de semana de septiembre para pasarlo juntas en Sevilla. Nuestro chat «ay que me secuestraaaan» tiene siempre actividad porque llevamos 1 año separadas: París, Londrés, Sevilla y Madrid. Y ya no podíamos más… Hay cosas que sólo se pueden contar a la cara, risas que echábamos demasiado de menos compartir y abrazos muy necesarios que nos hemos ido dando con prisas y cuentagotas cuando hemos podido vernos (de 2 en 2 normalmente). Así que, llegado el viernes, después de trabajar, recojo a Nereida en la parada del autobús al lado de la Fundación y ponemos «rumbo al sur». Sólo el trayecto en coche merecería otra entrada del blog… así que lo voy a reservar para otro día.
Describir cada plan y cada momento alargaría esto demasiado, pero lo importante es que al volver sentía una FELICIDAD tan grande que sólo podía reir, ver las fotos una y otra vez y contárselo a todo el mundo. Fue un fin de semana mágico, especial, divertido… una auténtica recarga de pilas y «descanso» a pesar de no haber descansado especialmente… Algo que se ha convertido en cita obligada ya todos los años!!! (Excepto en el 2016 que igual tenemos que adelantarla a mayo, jajajaja)
Pero además de todo eso, me permitió REENCONTRARME con alguien a quién sabía que echaba de menos, pero no que fuera TANTO. Y es que desde la primera conversación que tuvimos en la cena, desde ese «pues yo sí me lo podía imaginar»… VOLVI A VERTE María!! Volví a sentir esa conexión que yo explico como un CLIK, esa manera de encajar, de entendernos… recordé porqué siempre te he sentido tan cerca y tan especial. Y es que necesitaba hablar contigo, necesitaba esa tarde sentadas en tu terraza con confesiones y reflexiones… esos mimos y reir a carcajadas, mirarnos y entendernos!!!!
Y si ayer me fui a la cama FELIZ, de buen humor… fue precisamente porque estuvimos un buen rato hablando de todo por whatsapp antes de irnos a dormir. Igual que me pasa tantas y tantas veces con tu hermana… ME LO EXPLICÁIS?? QUÉ TENÉIS LAS GARCÍA LÁZARO??? Las/los López Soto, Cano, Zaforteza, Casteleiro, Ordovás, Gómez, etc… también sois muuuuy importantes para mí, pero estas chicas… no sé qué tienen, pero enganchan!!!
Y aquí enlazo con otra de mis «crónicas de un reencuentro» que ni me he molestado en pedirle a Isa teniendo en cuenta que todavía me debe hasta el feedback de Guinea (lo hago público, a ver si así te da hasta vergüenza y te pones manos a la obra, jejejeje. Juego sucio pero te quiero).
Mismo fin de semana… mismo momento especial que cuando la conocí… Ese irnos a dormir las últimas, con una luz a medias y hasta ya a oscuras hablando. Pero supo a tan poco… Que teníamos que repetir!! Así que aprovechando que te tengo aquí cerquita todo el año, ya instalada en Madrid, y que venía Piru a pasar el finde… otro reencuentro!! Con nuestro vinito y nuestro relaaaaaax… hasta que Piru pedía casi a gritos que la dejáramos dormir!!! Pobre.
Quiero más. Así que ayer le lancé la propuesta a María y hoy la repito: quiero un finde intensivo con las García Lázaro porque… «entre hermanas anda el juego» y no os puedo querer más a las dos!!! (Se acabaron los celos hombre!)