A veces creo que cuando más inspirada estoy para escribir es precisamente en los momentos en los que lo que siento ME DESBORDA. Y lleva siendo así un tiempo… pero nunca encontraba el momento para desahogarme en condiciones.
Son muchas las veces que he oído ya que “ser feliz es una decisión”. Y que “no hay mejor momento para ser feliz que ahora mismo”. Hay millones de textos, conferencias, frases… que nos rodean y nos recuerdan permanentemente el valor del tiempo, o las distintas perspectivas sobre la felicidad. Y produce un enorme placer cuando sientes que la lección está aprendida.
Se me saltan hasta las lágrimas al escribirlo, pero yo HOY, soy FELIZ. Llevo varios meses escribiendo en mi blog con otro tono al que lo hacía al principio. Hablando sólo de cosas buenas, cosas que me emocionan, que me llenan… Y me doy cuenta de que las historias que me generan nostalgia se me hacen bola y no consigo avanzar…
Y creo que es porque sí, he aprendido la lección.
Ahora decido todos los días ser feliz y quedarme con las cosas positivas. Obviamente tengo mis momentos no tan buenos, mis inseguridades, mis bajones… pero me encanta mi vida!!
Y una de las cosas que más energía me da y me hace pensar así es mi trabajo!! KUBUKA y todos y todo lo que lo compone, me llena de energía y me va cambiando como persona poco a poco…
Levantarme todos los días sabiendo que lo que tengo por delante no sólo no es un esfuerzo, sino que me produce verdadera alegría y satisfacción, no mirar el reloj ni pensar en si la cantidad de horas que tengo por delante es más o menos porque no me importa, es un lujo!!
Llegar a una oficina en la que el buen rollo y el compañerismo se respiran desde la puerta… otro lujo!!
Tener un equipo que cada día pasa más tiempo en esa oficina, que vienen, comparten, se esfuerzan y sacan el tiempo hasta de dónde no lo tienen… y encima son cada día más “amigos”, con los que me río en los chats de whatsapp hasta las lágrimas y cualquier plan me parece apetecible, que noto que confían en mí y me cuidan, otro lujo!!
Tener un jefe que confía en mí a veces hasta más que yo misma, mientras me reta y me obliga a hacer cosas que no se o no me gustan… Que agradece en la misma medida que exige y enseña… un lujazo!!
Creer ABSOLUTAMENTE en lo que hago, en cada paso que damos, en la recompensa que tienen todos los esfuerzos y dificultades a los que nos enfrentamos, y ver cómo crecemos de forma individual pero sobre todo como equipo… me pone la piel de gallina.
Hay gente que disfruta más estando “en terreno”, viendo cada día el desarrollo y la evolución de los proyectos. Y sí, no puedo mentir, a mí África me enamora, me llena, me inspira… y seguramente también sería feliz estando allí.
Pero HOY me importan las PERSONAS que están aquí, las que comparten mi día a día, las que tiran del carro en silencio. Me gusta pensar que les cuido y que mi labor está más en eso que en lo que pasa “en terreno”.
SE que soy una afortunada. Y también he aprendido a DECIDIR serlo…
Ahora convierto mis “no se” en tiempo para pensar en cómo hacerlo.
Mis “luego lo hago” en inmediatez para evitar la pereza.
Los favores que antes me costaba hacer, en energía para hacerle la vida más fácil a otro.
Mis inseguridades en risas y naturalidad…
Ahora pido más lo que necesito, doy lo que tengo, agradezco lo que recibo…
y soy MUY MUY FELIZ!!
Y lo comparto por si os puedo transmitir y contagiar un poquito de esa felicidad 😉
Gracias por compartirlo. Me contagias con esa felicidad